Archivos de plantas nombrados por los primeros colonizadores. Desarchivar un territorio, desinventar el nombre. Muestrario comienza desde un proceso de aprendizaje de las formas de relación vegetal en el bosque nativo. Guiados por las voces de las y los habitantes de Hornopirén, se empieza a entrever lo que queda de la selva, en un territorio devastado por el extractivismo industrial. Los artefactos que caen en este recipiente discuten, se reflejan y responden, en un intento de buscar otras formas de observar, relacionarse y convivir con el bosque para así, quizás, comenzar a comprender todo un entorno en riesgo de desaparecer para siempre.